La transformación digital, la pérdida de credibilidad, y el debilitamiento de las empresas periodísticas, son los temas que tocó Antonio Caño, connotado periodista español, ex corresponsal de agencia Efe, de El País (en México y en EE.UU), y que también llegó a la dirección de este periódico (2014-2018). Caño participó de la conversación pública con académica Alejandra Matus con ocasión de la primera Cátedra UNESCO 2023 realizada junto a la Escuela de Periodismo UDP.
Para Antonio Caño, no existe un horizonte esperanzador respecto a la crisis por la que atraviesa el periodismo. Sobre ello explicó que “uno de los principales conflictos en la pérdida de credibilidad de los medios tradicionales ha sido que, en muchos casos, estos han actuado como cómplices del poder económico y político”.
Asimismo, comentó que la gente está a la espera de medios independientes, aunque aclaró que “el periodismo necesita de empresas potentes que lideren la industria y capaces de proteger a los periodistas, pagarles buenos salarios, y darles las condiciones adecuadas para hacer frente a los grandes poderes”.
El ex corresponsal, que cubrió conflictos latinoamericanos como la dictadura de Augusto Pinochet y la guerra interna en Nicaragua, así como los conflictos en Medio Oriente; se refirió al aporte del periodismo: “Damos a las personas los datos que necesitan para comportarse como ciudadanos y así poder tomar decisiones en libertad dentro de sociedades democráticas”. Caño también habló sobre la complejidad que tiene el entregar información con objetividad: “La neutralidad de los periodistas es difícil porque la neutralidad del ser humano es difícil”. Sin embargo, a pesar del desafío, dijo que “es una obligación de los periodistas mantener una apariencia de imparcialidad porque el periodismo es fundamental para sostener la democracia”.
Por último, el exdirector del diario más influyente de habla hispana, señaló que las transformaciones digitales han traído consigo una época de incertidumbre generalizada que está afectando tanto a la sociedad como al periodismo. “Una de las preguntas más elementales y angustiosas que nos hacemos actualmente es respecto de dónde publicaremos las noticias y a quiénes nos dirigiremos”, dijo acerca de las variadas opciones de canales de información que existen y que dispersan a las audiencias, cosa que dificulta la masificación y la entrega de noticias a la gente.
